Por las restricciones sanitarias y en un contexto de creciente incertidumbre social, el grupo literario mudó sus encuentros semanales al formato virtual, para no perder la magia y seguir compartiendo la complicidad en las lecturas de obras diversas.
*Por Charly Esperanza. Publicando en el diario Primera Edición.
En los últimos años, en el medio de cada semana, para sacudirse los hilos de la rutina terrenal, un grupo de jóvenes se unió en la ciudad de Posadas dándole vida a los ciclos de “Poesía de Miércoles”, con lecturas, dramaturgia y narrativa. La excusa perfecta para las almas libres y hambrientas de encontrar entre la complicidad nocturna el hipnotizante aroma del papel de los libros que se abren descubriendo esas palabras que tanto queremos sentir y gritar.
Así, lograron construirse su propio espacio e identidad además de impulsar la generación de material para publicar y presentar libros al público.
El ciclo nació a fines del 2013 por iniciativa de Lucía Pérez Campos, técnica superior en Producción de Radio y Televisión, escritora y autora de las publicaciones “Piezas”, “24 Perros”, “Tedetexto”, “Minúscula”, y “Pero Se Puede Bailar”. Para la organización del ciclo de lecturas fue acompañada desde el inicio por Gerardo Aranda (Guano), encargado de la editorial e imprenta autogestionada Raymond a través de la cual se publicaron diversos libros de escritores locales.
Además, para la coordinación activa del grupo se fueron sumando diferentes personas, como Lurian Batista, Ludoviko Cortés Romero y Celia Pérez Campos, entre otros.
Dentro de las rondas que los poetas llevaron adelante con admirable constancia, las publicaciones, propias y ajenas, encuentran el terreno perfecto para dar otros pasos con el intercambio de las lecturas y la oralidad frente a los asistentes que se reúnen.
Sin embargo, llegó la pandemia del COVID-19 y modificó hasta las formas de respirar en la calle. Por ello, “Poesía de Miércoles” como todo evento socio cultural sufrió la pérdida de la posibilidad de utilizar un espacio físico para seguir con sus actividades.
Aún así, sus hacedores se negaron a mandar a dormir temprano a la magia y decidieron volcar las producciones al formato virtual. De esa manera, el canal de Youtube de “Poesía de Miércoles” es utilizado para difundir, cada semana, un video con las recopilaciones de las grabaciones que puede mandar cualquier persona sobre determinada obra escrita, siempre a elección libre de cada voz que le ponga sonido a las letras.
En diálogo con ENFOQUE, la creadora Lucía Pérez Campos remarcó que al comenzar a trabajar con el formato audiovisual para darle continuidad al ciclo a través de las plataformas digitales, descubrió que “en este momento compartir la soledad y hacer social el confinamiento de cada uno para mostrarlo es algo muy loco”.
Antes del despliegue de las medidas sanitarias en Posadas, los últimos encuentros físicos del grupo literario se llevaron a cabo en el Centro Cultural Vicente Cidade. “Desde el primer día que nos avisaron que no se podía ocupar el espacio, a mediados de marzo, comenzamos a usar el streaming. Sabemos que en el Cidade siempre somos bien recibidos pero obviamente en este momento no se puede”, recordó la escritora posadeña.
El recurso virtual
Sobre el aspecto técnico del ciclo virtual aclaró que se utiliza el sistema del “falso vivo”, para ello realiza la edición de los videos que recibe el grupo en los días previos a través del mail poesiademiercoles@gmail.com o en las redes sociales, se agregan descripciones a las imágenes, y se compagina la presentación, para unir todo en un solo archivo que es liberado a la transmisión online cada miércoles a las 22 horas.
Respetando el sentido que fomentaron desde un principio, Lucía recuerda que el ciclo está abierto para cualquier persona interesada en participar. Antes era cuestión de animarse, pedir para subir al escenario, ubicarse frente al micrófono y leer para el disfrute de la ronda; ahora, como todo cambió, la opción es grabarse y enviar el video.
“La onda es que manden el material como puedan, algunos hacen sus grabaciones directamente con la cámara del celular. Otros que por ahí tienen un poco más de conocimiento también editan lo que producen o le agregan música de fondo a su grabación”, destacó.
En relación a esto, Ludoviko Cortés Romero, nacido en Jardín América, conductor radial, autor del libro “Pintar Nubes con el Aliento”, creador de novelas y cuyas poesías circulan en fanzines, revistas, antologías, publicaciones online e incluso en papeles autoadhesivos, señaló que “el tema del aislamiento nos jugó bastante en contra porque la nuestra es una actividad donde buscamos la salvaguarda de la semana para reunirnos y compartir poesía. Entonces lo que tuvimos que hacer es adaptarnos para darle continuidad al ciclo. Por eso se reactivó el canal de Youtube donde se hacen las transmisiones, también hacemos vivos en la cuenta de Instagram donde buscamos dar a conocer a otros autores”.
Acostumbrados a saltar sobre piedras en el duro camino de la independencia y autogestión, rescató que “esta una oportunidad que nos sirvió para reactivar las redes, antes tal vez se utilizaba solamente para la difusión de un encuentro y ahora es un canal más amplio que nos permite mostrar lo que se hace en el ciclo”.
Mientras que Lurian Batista, nacida en Apóstoles, autora de los libros “Para Esto Querían Democracia” y “Jenga de Favores”, publicados con la editorial Raymond, indicó que a partir de las restricciones sociales el grupo comenzó a pulir la idea de recurrir al uso del streaming “porque lo que nos quedaba en ese momento era callarnos y esperar que pase todo, o aprovechar el momento justamente porque tal vez ahora la gente tiene mucho más tiempo para escuchar y expresarse”.
“También se aprovecha la charla virtual para llegar a gente que nunca iba o no conocía lo que es ‘Poesía de Miércoles’ y ahora sí se están acercando. Hay muchos que no conocían y se están sumando ahora, y esperemos que cuando todo esto pase también vayan a los encuentros que hacemos”, añadió.
El impulso de liberarse
Con la crudeza necesaria el grupo literario se aferra a la idea que ante la duda hay que recurrir a la poesía. Y en estos tiempos la incertidumbre se convirtió en el estado casi natural de todo.
“En este momento hay muchas dudas con todo, nadie sabe qué hay que hacer, mañana se puede caer el mundo pero ante la duda siempre está la poesía”, apuntó Lucía Pérez Campos.
A lo que Batista agregó: “Con toda la incertidumbre que estamos viviendo ahora, la poesía nos acerca y nos hace ver ese otro lado. La poesía nos salva una vez más, es la respuesta a un montón de cosas y lo que sobrevive en todas las épocas”.
“Ahora con esto de la cuarentena lo que tocó es ir un poquito más hacia dentro de cada uno. Nos tocó aislarnos y ver un poco más ahí, por eso creo que la poesía está yendo más para ese lado”, completó.
Por otro lado, Celia Pérez Campos, profesora en Filosofía y Lenguas Clásicas, autora del libro “Materia”, y participante activa del grupo, apuntó a la importancia de mantener la búsqueda de la libertad en lo literario y la oralidad. “Si hay algo que a mí me liberó fue la poesía, escribir. Con ‘Poesía de Miércoles’ entendí que no siempre hay que ser protocolar o hablar con la palabra bonita, esa es otra poesía. Aprendí que la poesía es libre y auténtica o no es. Entonces por lo general, me exijo pero también me siento muy libre cuando escribo y leo algo”.
“Al final muchas de las cosas que uno dice de onda, sin pulir, sin pensar, ni buscar la palabra adecuada, son las que a la gente más le copa después”, subrayó.
“La oralidad y la escucha es la idea de ‘Poesía de Miércoles’ porque algo pasa ahí que es diferente a todo. En mi caso compartir lo que escribo, el hecho de hacerlo real en el universo, aparte de la intimidad, fue lo que después me ayudó para publicar mi libro. Con las lecturas en ‘Poesía de Miércoles’ es como darle un empujón más a lo que uno escribe”, opinó.
Desde su existencia el ciclo literario acostumbró a sus asistentes a recurrir al llamado de cada miércoles. Y más allá de adecuarse a la situación actual que empuja al formato virtual para seguir en contacto y produciendo, siempre está latente la pregunta sobre cuándo será posible volver a reunirse, verse, escucharse las voces en vivo, y compartir las sonrisas como placebo en un mismo espacio.
“Lo que hablamos como grupo es que se extraña el juntarse, compartir, los abrazos, subirse al escenario, ver a la gente cara a cara, la devolución instantánea, son cosas muy necesarias, porque además en esos momentos se pone el cuerpo a la poesía, eso se extraña”, expresó Batista.
A lo que finalmente Lucía Pérez Campos comentó: “Se extraña leer frente a un grupo de personas. Leer en vivo es algo lindo. Además nosotros siempre nos basamos en el respeto para lo que lee cada persona que participa. Sabemos que es difícil exponerse así y por eso hay mucho respeto entre todos. Esas son sensaciones que se extrañan”.
Fotografías gentileza de Poesía de Miércoles.